Costeando el rìo Mendoza, se llega a este paraje de inigualable belleza rodeado de montañas. La zona fue habitada, por tribus Huarpes y ya en 1598 sus termas fueron aprovechadas, con fines curativos, por los Incas. El puente colgante es parte de la identidad de Cacheuta. Al atravesarlo se experimenta una sensación única.